¿Qué madre o padre no quiere que su bebé crezca sano, que tenga confianza en sí mismo, sea independiente y sepa querer y ser querido? Evidentemente, a todos. El término crianza con apego es una receta clave para alcanzar todas esas metas, de manera respetuosa y segura. Agrupa una serie de pautas y estrategias necesarias para reforzar el vínculo entre madre (o criador) e hijo: lactancia, porteo y colecho son alguna de ellas.
A lo largo de este artículo te iremos enseñando cuales son los principios básicos de la crianza con apego, así como sus diferentes beneficios y prácticas. Sigue leyendo… ¡Esperemos que te sea de utilidad!
¿Qué es la crianza de apego?
Este tipo de crianza incluye la atención y la respuesta sensible a los llantos del bebé, la proximidad física, el contacto piel con piel, la alimentación a demanda y el colecho (dormir junto a la cama con el bebé). Se cree que todo esto promueve la confianza, la autonomía, la empatía y las habilidades sociales del niño, así como una mayor seguridad en sí mismo y una mayor capacidad para establecer relaciones saludables en el futuro.
Si estás pensando en practicar colecho con tu bebé para favorecer dicha crianza con apego natural, puedes echar un vistazo a los diferentes modelos de cunas colecho convertible que tenemos en Alondra. En diferentes tamaños, diseños, con o sin ruedas, convertibles 2en1, 3en1, 4en1… ¡Para que elijas el que más te guste!
No obstante, hay que tener en cuenta que el exceso de atención puede provocar que el niño sea más dependiente, mimado, con rabietas… Como dice el Pediatra William Sears:
“El apego seguro se consigue respondiendo a las señales del bebé de manera sensible, apropiada y efectiva”
– Pediatra William Sears, 'gurú' de la crianza con apego y autor de bestsellers -
Los principios clave de la crianza con apego incluyen:
A continuación, te detallamos las prácticas básicas que se suelen realizar para favorecer dicha crianza:
-
Vínculo emocional seguro: Se busca establecer una relación cálida y afectuosa con el niño, proporcionándole seguridad y confianza en sus cuidadores.
-
Sensibilidad y respuesta rápida: Los padres o cuidadores tratan de entender y responder de manera sensible y rápida a las necesidades del niño, especialmente cuando llora o muestra señales de malestar.
-
Crianza consciente: Implica estar presente y consciente de las necesidades del niño en cada momento, fomentando una conexión emocional constante.
-
Porteo y contacto físico: Utilizar sistemas de porteo como pañuelos, mochilas o portabebés para mantener un contacto cercano y continuo con el bebé.
-
Alimentación a demanda: Ofrecer el pecho o el biberón cuando el bebé muestra señales de hambre y respetar su ritmo de alimentación.
-
Colecho seguro: Compartir la cama con el bebé, siempre y cuando se tomen las precauciones adecuadas para garantizar su seguridad.
Conoce más sobre el colecho seguro, sus beneficios y cómo practicarlo de forma segura con el bebé.
“La clave no es cuánto, sino el hacerlo cuando el bebé requiera de esa cercanía física”
- Pediatra y Psiquiatra William Sears, 'gurú' de la crianza con apego y autor de bestsellers -
Es importante tener en cuenta que cada familia y cada niño son diferentes, y no existe un único método de crianza que funcione para todos. La crianza de apego es solo uno de los muchos enfoques posibles y puede ser adaptada y combinada con otras formas de crianza, según las necesidades de cada familia.
Esperamos que os hayamos aclarado las dudas sobre esta crianza respetuosa y con apego.
